Wednesday, December 14, 2011

LA BANDERA - フラグが

En lo alto de la torre de la Ciudadela la bandera se deja mecer por el aire invernal de esta tarde de diciembre. El cielo de Hanoi está extrañamente azul estos días. Ésta es una ciudad de cielo gris las más de las veces. Especialmente en estos meses. Pero estos días está azul. Y un día detrás de otro. Y uno descubre lo mágica que puede ser la ciudad así. Lo distinta. Alguien se asoma a lo alto de la torre. Mira la ciudad desde una de las ventanas. Todos estamos incrédulos ante estos días de frío con un cielo cobalto sobre nosotros.


Thursday, December 1, 2011

UN ESPEJO - 鏡

Un espejo sobre ruedas delante de mí y cierta habilidad no exenta de riesgos y saco una foto de mi reflejo. Madrid está a cinco grados. Uf! Aquí todavía veinte pero el invierno espera para el Tet paciente y tranquilo. Sólo es una pequeña tregua.


Sunday, November 20, 2011

SAIGÓN

Saigón. Un día cualquiera. Recorro la distancia entre el Botanic Tower y el centro. Botanic Tower es una torre de apartamentos donde viven pilotos (me alojo en el apartamento de unos amigos del gremio que vuelan con Vietnam Airlines), expatriados y vietnamitas varios que no está lejos del aeropuerto. Camino entre las calles estrechas atravesando un río o aprendiz del mismo. Hace calor y de pronto una iglesia roja se yergue al fondo de la calle. Más allá llegaré hasta la Ópera. Saigón. Un caos sin formas. Pronto llegará la estación de las lluvias. 


Monday, November 7, 2011

SHANGHAI

Shangai tiene vida propia. Día y medio no es suficiente. La ciudad más grande de China. Veinticuatro millones de personas. Vemos el Bund, el nombre que dieron los ingleses al malecón de la ciudad que da al río Huangpu. Allí están los famosos edificios de los años treinta y cuarenta del siglo XX y que aparecen en tantas películas. Grupos de soldaditos se hacen fotos disciplinadamente frente a sus fachadas. 

Y frente al Bund el nuevo skyline futurista de Shangai (Pudong skyline) con el Shangai World Financial Center y la torre Jinmao como los alumnos aventajados del grupo. Altos y desafiantes con una ciudad inmensa que les rodea y les mira. Inevitable. Con el río rodeando el distrito la vista desde el Bund es impresionante. El primero tiene el mirador más alto del mundo. Como a mí me gustan las alturas allí vamos y miramos a la ciudad desde casi la luna. Piso número cien. Cuatrocientos setenta y cuatro metros. Un poco recurrente, lo sé, pero me acuerdo de la vista nocturna de la torre de Tokyo. No hay comparación.

Quizá la estación. Quizá el hermetismo clásico chino. La ciudad parece un poco distante. Y no hay puentes con su endiablado idioma. Los taxistas no hablan inglés y en la recepción del hotel a duras penas. Recorremos el barrio popular del centro con los jardines de Yuyuan como pequeña joya de un antiguo burgués que tardó veinte años en construirlos como homenaje a su padre, un oficial de la dinastía Ming. Son jardines, pequeños palacios y dragones en los tejados. También inesperadamente nos encontramos con la parroquia de San Francisco Javier, construida en el siglo XIX, que es una réplica de la iglesia del Gesú de Roma. En lo más profundo de Shanghai.


  



Monday, October 3, 2011

HANGZHOU Y LA MAGIA DE ZHANG YIMOU

Aterrizamos en Shangai pero la ciudad la dejamos a un lado por el momento. Nos dirigimos a Hangzhou en un autobús infecto desde el mismo aeropuerto. Luego volveremos a Shangai en un tren bala. Afortunadamente esto fue antes del accidente que tuvieron los chinos cerca de Shangai con un trenecito parecido. Los taxistas no hablan inglés. Algo maleducados. En el hotel tampoco brilla la inteligencia a la hora de orientarnos por la ciudad. Me acuerdo de Japón. 

El objetivo es un espectáculo sobre un lago. Un lago (West Lake) que curiosamente se llama como mi lago de Hanoi. Antes vemos un espectáculo en una especie de parque temático con guerreros de la dinastía Ming (por ejemplo). No está mal. Anochece. Vamos al lago para ver el show. De Hangzhou Marco Polo dijo que era la ciudad más bella que conoció nunca. El show lo ha concebido Zhang Yimou, director chino de películas como Sorgo rojo, El camino a casa o Hero. Soy un poco escéptico pero el espectáculo sobrecoge.

Noche cerrada. Algunas estrellas. Unas gradas en la orilla de un lago aparentemente tranquilo. Un lago circular. De pronto el agua se despierta. Y un ballet hermosísimo de barcos, guerreros, princesas, pequeños palacios... que surgen de las aguas, caminan sobre ellas, las sobrevuelan contando una leyenda de mil años atrás. El pequeño truco es que el escenario está tres centímetros por debajo del agua. Y claro, es un lago muy muy grande. Algo inimaginable. Un arcoiris de luces cambiantes aparece al fondo con árboles irreales de decorado. Una música mágica. Pura poesía sobre un lago de China a 1500 dólares la entrada más cara. La nuestra unos cien que yo recuerde. Una noche fría, pero sin lluvia. Hay viajes en autobuses sin nombre que merecen la pena por un par de horas perfectas.

Añado un pequeño video que grabé (pálido reflejo de lo que se ve realmente allí). Y también el oficial con el tema principal de la obra interpretado por Jane Zhang.











Saturday, September 10, 2011

HANOI. DOMINGO. LOS SECRETOS. ハノイ. 日曜日. 秘密

Segundo domingo de septiembre. Un domingo como todos. O no. El verano no da señales de debilidad. Un largo domingo por delante. Como a mí me gustan. Sin estrategias. Sin demasiadas alternativas ni ganas de buscarlas. Dejándolas que se asomen al teléfono móvil o que vengan a buscarte después de una siesta. Como ni se asoman ni vienen me voy de excursión al centro. Enfilo la larga calle de Tay Ho. La calle se llama como el barrio. Salgo del apartamento donde ahora vivo después de otra mudanza. Sí, otra más. Giro a la derecha y tras unos metros veo el lago tranquilo de Ho Tay. Nada especial. Me dejo llevar por el lento transcurrir del día y busco sus detalles. Como siempre.

Me encuentro con las tiendas de máscaras recién abiertas para el festival de la luna, donde los niños de Hanoi se imaginan dragones. Me fijo en el enésimo restaurante que abren en Xuan Dieu con su hora (tres en realidad) "feliz" esperándome la semana que viene. Tomo nota. De cinco a ocho. También detengo mi mirada en la azotea triste y vacía del Don's donde me fijé en Trang bailando hace ya más de un año. En la panadería francesa descubierta por Eduardo y Ana Gemma donde compraban dulces antes de emprender sus accidentadas caminatas por Hanoi el mes pasado y de la que ahora soy cliente preferente. Las horas discurren lentamente ahora con las campanadas de la catedral de fondo en Hoan Kiem. Regreso a casa.


Y se acerca el "sunset", que en esta ciudad siempre llega antes de tiempo. El crepúsculo que ahora intuyo desde mi pequeño patio. Los mosquitos dan hoy una tregua. Dejo la puerta abierta y miro entre mis discos de la librería del fondo. Y encuentro a Los Secretos. Los Secretos en Hanoi. Suenan intensos como pocas veces. Quizá es la distancia temporal y espacial de sus canciones con el extraño mundo que veo si me asomo a la calle. Escucho "Buena chica", "Déjame" (de una maqueta de Tos del año 78 (upsss)), "No digas que no", "Discos de antes", "Contando estrellas" o "La calle del olvido" ....  entre otras muchas. Las de siempre también.

Y me vienen a la cabeza algunos recuerdos. El concierto de Salamanca y el camino de vuelta con Rubén pateando las calles oscuras y rosadas. La amistad de Juliana y Ramón, un oasis en medio de Madrid. El vídeo del concierto de Las Ventas que me regaló Ramón a la salida de Galileo. Aquella canción que sonaba en el coche una y otra vez un día lluvioso en el año ochenta y ocho. No sigo. Hay domingos que son como un puzzle desordenado sobre una mesa.

Discos de antes


Pequeña joya cuya letra de Quique González viene hoy como dedo al anillo

Pd: Waw... el nuevo disco "En este mundo raro" que acaban de sacar. Y volando de nuevo con dos nuevos "clásicos": Trenes perdidos y Bailando con la luna. 



Friday, September 2, 2011

2 DE SEPTIEMBRE - 9月2日

Hace unas pocas horas. Un soldado atraviesa la enorme explanada verde situada frente al mausoleo de Hồ Chí Minh. Hoy hace sesenta y seis años que el tío Ho proclamó la independencia de Vietnam del Norte de los franceses. Éstos, ya en franca decadencia, entraron en guerra contra los viets con el resultado de todos conocido. Al fondo de la foto cientos de personas en fila de a uno (o de a dos) esperan envueltos en los treinta y cinco grados de Hanoi para ver a la momia de Ho (literalmente). Unos soldados de blanco reciben en la puerta y controlan escrupulosamente a los que se acercan hasta aquí para ver al tío Ho (como le conocen aquí) dormido y frío. No cámaras. No ropa indecente. No risas. Nada de eso está permitido. Vienen de todo el país. Ho quiso que esparcieran sus cenizas por todo Vietnam. Pero así son las cosas. Ahora está en una urna de cristal observado por cientos de ojos curiosos cada día. Las banderas rojas colorean el cielo hoy muy gris de Hanoi. Es fiesta nacional. El verano continúa inclemente sobre la ciudad.





Friday, August 26, 2011

MI TALLER DE MOTOS EN HANOI - ハノイのバイクショップ

Hay un taller, por llamarlo de alguna forma, al que llevo cada mil kilómetros más o menos la moto para que le cambien el aceite y le enchufen una manguera que la limpie el polvo de la ciudad. Con el jefe del taller, un chaval entrado en años con camiseta blanquinegra (por aquello de las manchas), me entiendo con alguna palabra vietnamita mal pronunciada y con muchos gestos. Aquí no se negocia el precio y son honrados, no me cobran más por ser extranjero, como pasa en algunos sitios. Un cambio de aceite son sus religiosos dos euros y medio.

Mientras realizan la operación me invitan a un té en unas tazas no demasiado limpias por decirlo suavemente. Al fondo aparece una señora que lava sobre el suelo del taller unos platos (éste como veréis es un tema recurrente). Al otro fondo hay un chamizo donde se ha instalado entre tubos de escape un lugar donde dormitan varios operarios. Mi taller de motos es un microcosmos del país donde se puede tomar pho bo, beber un té, dormir la siesta y si te animas, hasta te tunean la moto con el color y hasta con el escudo de tu equipo de fútbol favorito. Les digo que en este caso no hace falta. De mi taller siempre salgo sonriendo por lo que veo allí cada vez que voy. Siempre salgo sonriendo con mi moto de un blanco impoluto recién lavada a la búsqueda del tráfago de Hanoi.




Saturday, July 30, 2011

UNA CARNICERÍA DE HANOI - ハノイの肉屋


No es un pueblo perdido al norte de Vietnam, es una "carnicería" en un barrio céntrico de Hanoi. ¿Para que tener el género entre cuatro paredes si se puede ofrecer directamente al peatón o viandante?

Saturday, July 2, 2011

EL PARQUE DE LAS NOVIAS DE COLORES

El jardín botánico de Hanoi se llena, unos domingos sí y otros también, de novias a la búsqueda de doscientas cincuenta fotos selectas para sus lustrosos álbumes de bodas. Cada novia va acompañada del preceptivo novio, de un fotógrafo con cámara profesional ad hoc y de una cohorte de primas a la caza, maquilladoras con maleta portátil llena de cremas, vestidos de quita y pon y botellas de agua, madre vigilante del peinado imposible y el abuelo si las circunstancias de salud y meteorológicas acompañan.

Es divertido ver el cruce de cámaras, novias y paseantes del jardín mezclándose en la calurosa tarde de este fin de semana. Más o menos afortunadas por la madre naturaleza todas dan lo mejor de sí mismas sonriendo y obedeciendo las más extrañas peticiones de los fotógrafos. Éstos se recrean en pedirles poses que van desde los novios agachados buscando una moneda (o algo así) hasta la clásica foto mirando al infinito con ojos trascendentes y brillantes.

Según avanza la tarde el cansancio se acumula y muchas exhaustas se derrumban en las banquetas buscando un segundo de alivio al agotamiento. Muchos son muy jóvenes, apenas dieciocho años. Algunos de los novios tienen cara de susto. Ellas tienen cara de triunfo. La boda se realizará pasadas unas semanas o incluso unos meses. Nunca se hace en el mismo día. 

Novias con vestidos blancos, amarillos, rojos, violetas.... el arco iris completo al servicio de unas novias sedientas de recuerdos para el futuro.






Tuesday, June 14, 2011

TRANSPORTE DE ANIMALES EN VIETNAM


Sólo temíamos que con el bamboleo del cerdo (abierto en canal), éste acabara en medio de la autopista. Afortunadamente el colega tenía práctica.

Friday, May 27, 2011

UN ROLLS EN HANOI

Un toque de surrealismo aderezado quizá con una dosis de corrupción. Un Rolls Royce en medio del millón de motos de cuatrocientos dólares de Hanoi. No es el primero que veo.


Tuesday, May 17, 2011

REFLEJOS NOCTURNOS EN TRUC BACH

Ocho de la tarde. Truc Bach y sus aguas son un perfecto espejo en el abismo de esta noche oscura y fría de Hanoi de este extraño mes de mayo.

Friday, April 29, 2011

HANOI DULCES SUEÑOS


Hanoi. Centro de la ciudad. Dos de la tarde. Atascos, ruidos, polvo y barullo. Sueño profundo entre el caos. Una extraña muñeca me mira silenciosa. Se ve que el negocio va bien. O no.

Thursday, April 21, 2011

DOMINGO DE RAMOS EN HANOI

Es domingo de ramos en Hanoi. Una religiosa entra en la Catedral por una escalera lateral. Dentro un grupo de niños escucha atento entre las bóvedas de Nhà Thò Lón. Al norte, en Laos, las cosas son más complicadas. Hace unos días han asesinado a cuatro mujeres cristianas de la etnia Hmong cerca de la frontera. 



Friday, April 15, 2011

BARES DE CARRETERA EN VIETNAM

La experiencia de parar a tomar algo en los "bares" o restaurantes de carretera de Vietnam es algo no apto para todos los paladares. Y más si se llega a horas no habituales. Muchos de ellos sirven literalmente la comida junto a la vía pública por lo que la mayoría de los platos vienen aderezados con una mezcla de humo, polvo y ruido difícil de imaginar y un poco incomprensible, pudiendo poner una pared o una cortina. Éstos hay claramente que evitarlos e intentar que estén alejados al menos veinte metros del arcén. No obstante el viet típico, si puede comer en la misma mesa con su moto, mejor que mejor.

La limpieza tampoco es su fuerte y uno reza por no pillar nada. Ver los platos en el suelo en baldes de plástico y un perro durmiendo al lado y no salir corriendo no es fácil. Pero es tarde y es lo mejor que hemos visto desde hace dos horas. Uno confía en la divina providencia y el estómago vacío además presiona bastante. Un calendario de una mujer militar acompaña a comensales solitarios. Creo que invita al personal a enrolarse y a vestirse de caqui aunque la muchacha vaya de blanco. La gente tampoco es especialmente amable pero la señora hace su trabajo y tarda unos minutos en extraer de la olla humeante el esperado plato de sopa. Tengo que decir que éste fue de los mejores pho bo (noddles con ternera) que recuerdo. Hay que ver lo que hace el hambre.